El estudio de la Encuesta Focalizada en Pobreza parte de los esfuerzos por establecer una medición general de la pobreza y condiciones generales de acceso a ciertos derechos básicos (educación, alimentación, programas sociales) en las 2,007 aldeas más pobres del país identificadas por la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL). El Instituto Nacional de Estadísticas (INE), ha estimado que, en estas aldeas, hay un aproximado de 393,503 viviendas. A partir de esta información se procedió a realizar una encuesta con una serie de preguntas sobre los temas indicados, con una muestra de 2,652 viviendas, con lo cual se realizó el procedimiento de levantamiento de información de campo. Los datos preliminares del estudio permiten establecer algunos aspectos relevantes de esta población.
El INE busca conocer la situación educativa de los niños y adolescentes de 3 a 17 años y las condiciones de la población hondureña, especialmente de los grupos más vulnerables. Con esa intención se realizó un estudio en los municipios con más altos índices de pobreza ubicados en las zonas rurales. Este informe rescata los datos más relevantes sobre la situación educativa de los niños en edad escolar de 3 a 17 años, población que idealmente debería encontrarse inserta en el sistema educativo. Según la distribución planteada por la Secretaría de Educación (SEDUC) los niños, niñas y adolescentes de 3 a 17 años deberían encontrarse en prebásica, básica o diversificado.
Asistencia escolar
En este estudio se consultó, a los jefes y jefas de hogar ¿si los niños estaban asistiendo a las clases?. Los resultados reflejan que un 74 % de los hogares, ubicados en las aldeas con mayores índices de pobreza, reportaron haber tenido a los niños matriculados en el 2022. Este dato desagregado por rangos de edad muestra que los niños y las niñas de 5 a 11 años presentan mayor prevalencia de matrícula.
Aproximadamente un 30% de la población estudiantil muestra un recorrido irregular por el sistema educativo, ya que ingresan en el primer ciclo y se retiran al iniciar el tercer ciclo. Al analizar la trayectoria educativa de esta población encontramos que aproximadamente el 90% de niños y niñas que están matriculados en prebásica y primer y segundo ciclo tiene la edad adecuada; sin embargo, en los estudiantes de 11 a 15 años presentan un 55% de sobre edad, es decir, que están en edad de estar en tercer ciclo y continúan cursando primero o segundo ciclo. En los jóvenes de 15 a 17 años, este dato es aun más drástico ya que un 96% de los jóvenes matriculados presentan sobre edad.
Merienda escolar
El programa de merienda escolar liderado por distintas instituciones de gobierno otorga la merienda en prebásica y educación básica dando cobertura a los tres ciclos educativos. Según cifras obtenidas en este estudio, un 95% de los estudiantes matriculados en prebásica tienen acceso a la merienda, al igual que un 90.3% matriculados en el primer y segundo ciclo de básica, cifra que disminuye drásticamente al tercer ciclo donde solo un 36.5% tienen acceso a la merienda escolar, finalmente el programa no pretende tener cobertura en los centros de educación media.
Cuando se analiza esta relación según la edad de los estudiantes, como se observa en la siguiente gráfica, un 81.1% de los infantes de 3 a 5 años tiene acceso a la merienda, así como un 79.6% de los niños de 6 a 11 años. Está diferencia entre los niveles educativos se debe a la edad que tienen los educandos, es decir, que los centros educativos están dando la merienda, pero por la sobre edad de muchos estudiantes, no coinciden su edad escolar con el acceso a la merienda según nivel educativo.
La frecuencia con que se recibe la merienda escolar en los tres niveles de educación básica varía, mostrando que en primer y segundo ciclo la mayoría de las familias reciben este beneficio solo algunos días, en cambio en tercer ciclo la mayoría reporta recibirlo todos los días.
Costos en educación
70% de las familias con niños en pre-básica y básica, en las aldeas con mayores índices de pobreza rural, reciben merienda escolar y reporta un ahorro, al menos, de 300 Lempiras
Se les consultó a las familias entrevistadas cual sería el costo mensual que tendría sobre sus hogares la falta de acceso a la merienda escolar, sus respuestas fueron agrupadas en rangos, de 0 a 300 Lempiras, de 301 a 600 Lempiras y más de 601 Lempiras. Como se puede observar en el siguiente grafico la mayor parte de familias se encuentran en el rango hasta 300 Lempiras, en el nivel de prebásica 6 de cada 10 familias reportaron ahorrarse más de 300 Lempiras mensuales, al igual que en primer y tercer ciclo, en segundo ciclo 5 de cada 10 familias reportaron tener este nivel de ahorro al recibir la merienda escolar.
En cuanto a otras inversiones que hacen las familias para tener a sus niños en las escuelas, manifestaron que estos son los útiles escolares, los uniformes y el transporte, entre otros. En la gráfica que se presenta a continuación se puede observar que los útiles escolares representan el mayor gasto para las familias, seguido por los uniformes, los útiles escolares son un costo que se encuentra presente y constante en todos los niveles del sistema educativo, los uniformes muestran una trayectoria en ascenso subiendo un 8% desde prebásica hasta media.
La matrícula, la mensualidad, el aseo y vigilancia del centro educativo son los rubros que representan menor costo; sin embargo, todos ellos muestran una trayectoria ascendente a medida que los estudiantes suben de nivel, lo que muestra una clara relación entre la necesidad de recursos y el acceso al sistema educativo, ya que las familias reportan que desde el momento que los infantes ingresan a prebásica hasta que llegan a media la inversión en matricula y mensualidad se duplica, y en aseo y vigilancia se triplica pasando de un 10.6% de familias que hacen esta inversión a un 34.8% de familias.
Nivel de ingreso y educación
Se les consultó a las familias sobre el nivel educativo más alto alcanzado por sus adolescentes de 15 a 17 años, y se analizaron estos datos a la luz del nivel de pobreza de las familias, relación que se puede observar en la siguiente grafica.
La mayor parte de jóvenes independientemente de su ingreso económico en edad de 15 a 17 años se encuentra cursando el tercer ciclo, lo que refleja al menos un grado de sobre edad son de acuerdo con la edad oportuna, ya que idealmente deberían estar en nivel de media. Se observa que existe un descenso de tercer ciclo a media, mostrando además que los jóvenes de familias no pobres son los que más tienen acceso a este nivel educativo, superando a los jóvenes de pobreza relativa por 5 puntos porcentuales y a los de pobreza extrema por 7.
Finalmente se indagó sobre los sistemas a través de los cuales se está ingresando al sistema educativo y se encontró que la mayoría de los jóvenes independientemente de su estrato económico estudia en es sistema público así lo manifiestan desde un 86 de familias no pobres hasta un 92% de familias en pobreza relativa y extrema. Un 5% de familias en condición de no pobres manifestó tener a sus hijos en centros educativos privados, 1.4% bilingües. El resto de niños, niñas y adolescentes con matriculados, se encuentran en centros PROHECO, así lo indica aproximadamente un 5% de las familias.
Conclusiones
1. El programa de merienda escolar esta llegando a los Centros Educativos de los niveles prebásica y básica, esto implica un ahorro en las familias de entre 300 y 600 lempiras lo que representa un apoyo económico en los hogares más vulnerables.
2. Para el nivel del primero y segundo ciclo un 55% de los estudiantes matriculados presenta al menos un año de sobre edad, cifra que asciende dramáticamente en los jóvenes de 15 a 17 años donde un 96 % niveles presenta sobre edad es decir que están matriculados en alguno de los tres niveles de educación básica.
3. Los útiles escolares y los uniformes representan la mayor inversión realizadas por las familias que tienen a sus hijos estudiando. Esta se mantiene a lo largo del todo el recorrido educativo.